Debajo de la cama
Al terminar la Primera Guerra Mundial el emperador alemán, el Kaiser
Guillermo II se exilió en los Países Bajos y nunca más volvió a su país. Aunque
se intentó juzgarlo por las responsabilidades que se le imputaron, no fue
extraditado. Murió en 1940.
En la viñeta se muestra al emperador escondido bajo la cama mientras los
aliados -que toman forma en una mujer un poco cabreada- están esperándole para
poder pegarle con un rodillo.
El alma de Bélgica
Inconquistable.
El
Kaiser: Mira, lo has perdido todo.
El
rey de los belgas: Excepto mi alma.
Esta
frase más propia de
Horatio Caine refleja la admiración, fruto de la compasión, que la
Europa aliada tenía
por la pobre Bélgica.
La Mejor Madre del Mundo
Este
cartel de la Cruz Roja es de 1918 (aprox.) Hay una clara referencia a La
Piedad, el momento en el que la Virgen María sostiene en brazos a su hijo
recién descolgado de la cruz.
Si
lo trasladamos a la Primera Guerra Mundial, la Cruz Roja ejercería el papel de
madre protectora de sus muchos hijos: los soldados del frente.
Hacia la victoria
Las potencias aliadas en la Primera Guerra Mundial, por orden de
importancia.
Curiosidades: las banderas de Rusia y Japón pertenecen a las de sus
respectivas armadas.
Qué interesantes las viñetas y las fotos y, sobre todo, ¡vuestros certeros comentarios!.
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